La mitología

Los mitos

Los mitos son narraciones protagonizadas por dioses o por héroes con las que se pretende dar una explicación del mundo.

 

Seres mitológicos

  1. Los dioses:  Los protagonistas de los relatos míticos son los dioses que poseen cualidades extraordinarias.
  2. Los héroes: Pueden ser humanos o semidioses (hijos de un dios y de un humano). Poseen cualidades especiales. Se enfrentan a todo tipo de pruebas y pueden recibir la ayuda de los dioses.

 

De todo lo que hay en internet os he seleccionado estos tres enlaces con los que vamos a trabajar y que me parecen más que suficientes para una introducción a la mitología griega.

 

Mitología en general (muy interesante)

Curso de mitología clásica

Temas comunes y básicos de la mitología

 

Tenéis que desarrollar el siguiente trabajo:

Es muy sencillo. Cada uno de vosotros tiene que elegir un mito de los que salen en las páginas que os he citado. Resumirlo para una exposición de dos minutos como máximo y contarlo en clase (ya os diré cómo hacerlo) al resto de compañeros. Ya está. ¿Nos ponemos a ello?

 

Resumen de la Ilíada

La Ilíada trata de la cólera humana, de sus causas, sus consecuencias, y de su apaciguamiento. Todo esto tiene como ambiente de fondo el último año de la toma de Troya.

 

• Príamo y Hécuba, reyes de Troya, lograron su anhelo de tener un heredero, al que llamaron Paris.

• La diosa Venus promete a Paris darle por esposa a la mujer más bella del mundo, Helena, esposa de Menelao, rey de Esparta. La reina se enamoró de Paris nada más verlo y huyó con él a Troya.

• La fuga de Helena con Paris provocó que cien mil hombres en ciento ochenta naves salieran de Grecia con rumbo a Troya. Es el comienzo de la Guerra de Troya que duró diez largos años.

• Se enfrentan pues los troyanos (Príamo, Paris, Héctor) y los aqueos (los griegos: Aquiles, Menelao…)

• Ante los muros de Troya día tras día, año tras año, permanecían los griegos en sus campamentos hostigando continuamente a los troyanos con sus furibundos ataques […] Entre los más violentos guerreros que en aquella lucha se encontraron contábase Aquiles, el de los pies ligeros. Era el más valeroso de los héroes griegos y el más hermoso también. Se cuenta que, de niño, su madre le bañaba en fuego celeste para hacerle inmortal, y que quedándole fuera del fuego únicamente el talón con que ella le sujetaba, era éste su único punto vulnerable. Dícese también que, estando todavía en la infancia, su madre le dio a elegir entre una carrera larga y oscura y una vida corta pero gloriosa. Y él optó por esta última.

• El poema comienza con la disputa entre los dos líderes del ejército aqueo, Aquiles y Agamenón. Aquiles había recibido una doncella llamada Briseida como recompensa de combate. Sin embargo Agamenón, haciendo gala de su poder, decide quitársela. Resentido por esta pérdida, Aquiles se niega a seguir colaborando con el ataque a Troya y retira a sus tropas.

 

• Los troyanos aprovechan esta situación y empiezan a obtener victorias. Ante esta adversidad, Agamenón le devuelve a Aquiles su esclava con la intención de que vuelva al combate. Sin embargo el orgulloso Aquiles no accede a la petición.

 

El mejor amigo de Aquiles, Patroclo, le suplica que le preste sus armas. Lidera al ejército y ataca a los troyanos. Pero, en la batalla, Patroclo es matado por Héctor, hijo del rey Príamo de Troya.

 

Aquiles queda muy afligido por el dolor de haber perdido a su mejor amigo. De hecho, este suceso cambia el curso de la guerra: Deja de lado su conflicto con Agamenón para conseguir su deseo de venganza contra Héctor.

 

• Héctor esperó a Aquiles en soledad, listo para luchar. De un lado estaba el guerrero más temido dentro del ejército troyano; del otro, el mejor combatiente entre los aqueos, ampliamente conocido por su ferocidad.

 

• Era tal la fama de Aquiles que, al verlo llegar, Héctor escapa corriendo lleno de miedo, llegando a dar tres vueltas alrededor de la ciudad de Troya. El guerrero aqueo lo persigue frenéticamente, hasta que finalmente Héctor deja de correr y decide enfrentarlo.

 

Aquiles atraviesa la garganta de Héctor con su lanza. Mientras estaba muriendo, el guerrero troyano pide un funeral honorable. Sin embargo Aquiles, aún sediento de venganza, toma el cadáver y lo arrastra alrededor de los muros de la ciudad. Luego se niega a devolver el cuerpo de Héctor a su familia.

 

• Tras el funeral de Patroclo, que contó con sacrificios y juegos en los que se repartieron premios, Aquiles continuó amedrentando a los troyanos con el maltrato del cadáver de Héctor.

 

• Finalmente el viejo rey Príamo se presenta solo ante las naves aqueas para suplicar la devolución del cadáver de su hijo. Conmovido ante este acto, Aquiles decide acceder a la petición. El combatiente aqueo siente afinidad con Príamo porque también está triste por la muerte de un ser querido, Patroclo.

 

La Ilíada concluye con un abrazo y una tregua en la que se dan los funerales de Héctor.

 

 

 

 

 

Resumen de la Odisea

 

(ver una bonita versión abreviada en: https://colegios.pereiraeduca.gov.co/instituciones/galeriadigital/Espanol/_Literatura/Doc_web/Libreria%20infantil1/sites/rincon/trabajos_ilce/ulises/sec_2.html)

 

 

La Odisea ha sido descrita como el libro de la inteligencia y la astucia. La historia que narra ocurre luego de la caída de Troya en una guerra en la que Ulises, también conocido como Odiseo, se había destacado por lograr con su mente lo que no pudo lograrse por la fuerza. A continuación veremos un resumen de la Odisea.

 

Habiendo pasado diez años desde la caída Troya, Odiseo todavía no pudo volver a su hogar en el reino de Ítaca en Grecia. Mientras tanto Penélope, su esposa, resistía a los pretendientes que la cortejaban e intentaban convencerla de que el héroe griego había muerto.

 

Ayudada por Mentor, amigo fiel de Odiseo, Penélope crió al príncipe Telémaco, hijo de Ulises. Telémaco anhelaba desesperadamente expulsar a los pretendientes de su madre, pero no tenía la confianza ni la experiencia para luchar contra ellos. Uno de los pretendientes, Antinoo, planeaba asesinar al joven príncipe y así eliminar el único obstáculo en su plan de dominar el palacio.

 

Lo que no sabían los pretendientes es que Odiseo aún estaba vivo en la isla Ogigia, de la bella ninfa Calipso, quien enamorada de él lo mantenía allí encarcelado. Ulises deseaba volver con su esposa e hijo pero no tenía forma de escapar.

 

Mientras los dioses del Monte Olimpo debatían el destino de Odiseo, la diosa Atenea decidió ayudar a Telémaco. Disfrazada de un amigo del padre de Ulises, lleva al príncipe a Pilos y Esparta, donde los reyes Néstor y Melenao, compañeros de Odiseo durante la guerra, le informan que su padre sigue vivo y atrapado en la isla de Calipso. Telémaco planea volver a su casa en Ítaca, pero Antinoo y los otros pretendientes lo esperaban con una emboscada con la que planeaban matarlo al llegar al puerto.

 

Mientras tanto, para rescatar a Odiseo, el dios de los dioses Zeus decide enviar a Hermes, quien logra persuadir a la ninfa Calipso de que permita a su prisionero construir un barco y abandonar la isla de Ogigia. De esta forma Odiseo recupera su libertad.

 

En su camino a Ítaca, Odiseo naufraga junto a la costa de Feacio y es rescatado por la joven Nausica, que se enamora de él y lo conduce al palacio de su padre, el rey Alcino. Durante la fiesta celebrada en su honor, Odiseo revela su verdadera identidad y cuenta a sus anfitriones las peripecias por las que tuvo que pasar durante la guerra de Troya y las desventuras que le impidieron volver a Ítaca.

 

Odiseo relata como, luego de abandonar Troya, él y sus compañeros navegaron hacia la región de los cíclopes, donde fueron capturados por el cíclope Polifemo, hijo del dios Poseidón. Engañándole, Odiseo consiguió emborrachar al gigante, y una vez dormido, le clavó una estaca en el ojo y huyó con los suyos. (ver la narración en: https://www.guerreroalcazar.es/nueva_compr/cuentos/ULISES%20%20Y%20POLIFEMO.doc)

A continuación visitaron al dios Eolo, quien les concedió un viento favorable para llegar a casa y les ofreció un odre lleno de vientos tormentosos. La tripulación, llevada por la curiosidad, abrió el odre y un terrible huracán los arrastró a las Eolias. Odiseo y los suyos desembarcaron entonces en el país de los lestrigones, una isla habitada por caníbales gigantes que devoraron a varios de ellos.

 

Los sobrevivientes desembarcaron en la isla de Circe, una hechicera con poderes para transformar a las personas en animales. Odiseo se ganó su amistad y Circe le ofreció su hospitalidad durante un año. Antes de partir, el héroe griego siguió el consejo de la hechicera y consultó al vidente Tiresias la manera de encontrar una ruta segura hacia Ítaca. Para ello, bajó al mundo de los muertos donde se cruzó con muchas almas, entre ellas la de su madre, Anticlea, y las de sus amigos Agamenón y Aquiles, muertos en la guerra de Troya.

 

Retomado el camino a casa, se encontraron con las sirenas. Odiseo consiguió que sus hombres resistieran a los cánticos seductores de estas criaturas siguiendo la recomendación de Circe de taparles los oídos con cera y atándose él mismo al mástil del barco de manera que pudiera oír su dulce voz sin peligro. Después de resistir el letal remolino de Caribdis en el mar y de escapar a Escila, un monstruo de seis cabezas sediento de sangre, llegaron a la isla donde Apolo cuidaba de su ganado. Hambrientos, los hombres ignoraron todo aviso y sacrificaron algunos animales, lo que provocó que Apolo enviara una tormenta de la que Odiseo fue el único sobreviviente.

 

Tras la tormenta, Odiseo fue arrastrado hasta la costa de Ogigia donde Calipso, la bella ninfa del mar, se enamoró de él y lo mantuvo prisionero durante ocho años, prometiéndole buena suerte e inmortalidad. Finalmente, Atenea intercedió ante los dioses y estos convencieron a la ninfa de que lo liberara.

 

Justo cuando comenzaba a ver el final de su viaje, Odiseo se topa con otra desgracia: el dios Poseidón, enfurecido por la humillación que le había infligido a su hijo Polifemo, envió una violenta tormenta que le hizo naufragar en la costa de Feacio. Y así es como termina la narración de Odiseo ante el rey Alcino quien, conmovido, le proporciona un barco para que pueda volver a Ítaca.

 

Siguiendo el consejo de Atenea, Odiseo desembarca en Ítaca disfrazado de mendigo. El pastor Eumaeus le informa de la arrogancia de los pretendientes de Penélope y de la fidelidad de ésta. Entonces Odiseo se reúne con su hijo Telémaco y le revela su identidad. Oculto por su disfraz, Odiseo llega al palacio donde nadie lo reconoce excepto su fiel perro Argos y su antigua sirvienta Euriclea. Penélope cuenta al mendigo el engaño con el que había conseguido evitar la elección de un nuevo esposo entre sus muchos pretendientes: les prometía elegirlo una vez que hubiese terminado de tejer la mortaja para su suegro Laertes pero deshacía cada noche el trabajo realizado el día anterior. El ardid le funcionó hasta que una criada la traicionó, y Penélope no tuvo más remedio que completar su trabajo. La vuelta de Odiseo se produce en el momento en que los pretendientes intentan forzarla a tomar una decisión.

 

Es entonces cuando Penélope tiene la ocurrencia de someter a sus pretendientes a una competición cuyo vencedor se convertirá en su esposo. Cada pretendiente debe lanzar una flecha con un arco mágico que sólo Odiseo sabe utilizar. Todos los participantes fracasan en el intento excepto Odiseo, todavía disfrazado de mendigo. Después de la victoria, Odiseo y Telémaco ejecutan a todos los pretendientes.

 

Finalmente, Odiseo revela su verdadera identidad a Penélope, quien lo recibe con lágrimas de alegría. La diosa Atenea retrasa el amanecer para prolongar su reunión. De esta forma Odiseo cuenta sus aventuras a su esposa mientras yacen en el lecho matrimonial. La diosa interviene por última vez a favor de Odiseo contra los parientes de los pretendientes que querían vengarse. La paz vuelve a establecerse en el reino.